“No piense el hombre que recibirá cosa alguna del Señor si él es de doble ánimo, pues no es nada más que una ola del mar que es movida y sacudida por el viento.”
Cada día realizamos ciertas actividades que nos alejan de nuestro centro e influyen en nuestro estado de ánimo, desanimándonos o alterándonos y en estas circunstancias es difícil manifestar nuestro poder creativo.
A continuación veremos cuáles son:
- Ver o escuchar noticias. Aunque no queramos estamos rodeados de noticias de todo el mundo. Encendemos la radio y tenemos noticias, ponemos la televisión y tenemos noticias mañana, tarde y noche. Las redes sociales conocen nuestros gustos y nos muestran cada día más, si vemos noticias nos mostrarán más de lo mismo. Al ver, oír o leer las noticias le abrimos la puerta al miedo, a la inseguridad, a la violencia. Empezamos a tener sentimientos de escasez económica y creemos que en el mundo existe solo maldad. Como decía Neville Goddard en “El Diluvio está todavía sobre nosotros”: “Los hechos han inundado al mundo como el diluvio. El hombre realmente esta “ahogado” con hechos, victimizado por hechos. Es en la imaginación donde todo vive, y no en su realidad, no en el hecho. A menos que la imaginación penetre los hechos, el abrumado permanecerá inundado. Ahora estamos en la inundación. ¡Esto es el diluvio!“. No dejes que los hechos del mundo te abrumen y no se trata de ser insensibles pero no se trata de cambiar la realidad desde fuera, tenemos que empezar por cambiarla desde dentro, desde nosotros mismos.
- La música que escuchas. La música puede cambiar tu estado de ánimo, algunas canciones te pueden elevar, relajar y te pueden inspirar, otras sin embargo te perturban y peor aún, implantan pensamientos o ideas autodestructivas en tu mente como el desánimo, la tristeza, el desamor, pueden llegar incluso a inducirte a la violencia, al alcoholismo, etc. Así como deseamos vigilar nuestra alimentación para tener un cuerpo más saludable, debemos vigilar lo que entra en nuestra mente, porque aunque tengamos la música de fondo, nuestro subconsciente la escucha y aunque no lo queramos ese nivel de vibraciones que emiten pueden llegar a afectarnos.
- Discutir con los demás acerca de política o ideologías. Esta es otra consecuencia de las ideas implantadas en nuestra programación mental, no debemos tratar de imponer nuestras ideas y tampoco dejarnos arrastrar por la moda o las tendencias del pensamiento, debemos cuestionarnos todo, ser nosotros mismos y tener empatía con los demás, ponernos en el lugar del otro. Todo tiene sus matices y si prestas atención y te dejas llevar por el discernimiento te darás cuenta de que no vale la pena discutir con tus amigos o familia por temas de actualidad si no más bien compartir momentos sanos de diversión encontrando puntos en común y que de cada situación podemos aprender algo y tambi´én comprender por qué cada persona piensa de una forma u otra, si no permaneces en tu centro, te dejarás arrastrar por la corriente y eso es lo que pasa con la mayoría.
“Si sabes quién eres y como funciona la imaginación, aprenderás a controlar tus actividades imaginarias, si no lo haces, serán controladas para ti por otra persona y te convertirás en su víctima”
Neville Goddard